Típicamente mediterráneo, el hinojo es una planta muy refrescante y digestiva que se ha utilizado tradicionalmente tanto en el campo de la gastronomía, como en el de la medicina natural. Nosotros te proponemos emplearla en ambos ámbitos y disfrutar de ella.
De agradable olor mentolado y muy aromática, el hinojo es una de esas plantas que, al igual que la manzanilla o la tila, siempre debería estar en todos los hogares en los que se tengan en cuentas las plantas medicinales, no sólo para cuidar de la salud general de todos los miembros de la casa, sino también para disfrutar de bebidas naturales muy agradables. Agradable, en este caso, por su sabor, pero también por su aroma. La combinación de ambos hace que el hinojo se haya empleado tanto a modo de remedio natural, como para la gastronomía.
En lo que a la medicina natural se refiere, el hinojo es una planta diurética y digestiva, por lo que es ideal para tomar tras las comidas o cenas y poner nuestro sistema digestivo a punto, especialmente si este tiene tendencia a ser vago. De hecho, también es un excelente desinflamatorio intestinal, por lo que gracias a él te podrás olvidar de las flatulencias o de los estómagos hinchados.
Además, tomar una infusión de hinojo aporta a nuestro organismo una gran cantidad de vitaminas y minerales, tales como vitamina B3 y provitamina A, Vitamina B6, Ácido fólico (Vitamina B9), vitamina C, fósforo, potasio, hierro, magnesio y calcio, entre otros. De hecho, el té de hinojo es una bebida para ayudar a reducir los nervios en caso de estrés o ansiedad.
Si tienes el pecho cargado, las propiedades antitusivas del hinojo harán que la tos disminuya y que tus pulmones se vayan abriendo poco a poco, por lo que, si tomas de 2 a 3 tazas al día de esta bebida natural podrás mejorar considerablemente en pocos días.
En el caso de las mujeres,los expertos aseguran que reduce los dolores de la menstruación, además de aumentar los pechos y estimular la leche para las mujeres en periodo de lactancia.
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