Especiado y aromático, este té es ideal para comenzar el día con buen pie y recargar las pilas con los minerales y vitaminas que nuestro cuerpo necesita. Es bueno durante o tras hacer deporte, para recuperarse.
El otoño es una época en la que nuestro cuerpo necesita más que nunca estar bien cargado de defensas para evitar, en la medida de lo posible, coger los tradicionales catarros o gripes tan característicos de esta época del año en la que la temperatura es tan cambiante y por las mañanas hace mucho frío, pero en cuanto sale el sol, la cosa cambia.
Por eso, en Aromas de Té nos hemos inspirado en esta época para elaborar este rooibos, sin teina, sin gluten y que toda la familia puede disfrutar en cualquier momento del día, pero que, además, sirva para aumentar vuestras defensas, si lo tomáis de forma regular y moderado.
Un buen momento para tomarlo puede ser en el desayuno. Lo primero que te llamará la atención del mismo será su aroma a canela, que predomina con claridad. Sin embargo, cuando lo pruebes, esta especia dejará paso al jengibre y los pétalos de rosa, que darán un giro al dulce sabor de la canela, para aportar un toque ácido y hacer que el resultado sea sorprendente.
Además, tanto este rooibos, como el resto de los que podrás encontrar en Aromas de Té, son ideales para deportistas o para personas que salen a caminar, al monte, etc. En definitiva, para todos aquellos que hagan algún tipo de ejercicio, fuerte o moderado y que deseen recuperar fuerzas e hidratarse durante la práctica y después de la misma. De esta forma, no sufrirás la tan poco deseadas agujetas que dejan algunos deportes al día siguiente.